#CuestionesTácticas

#Unequipohechoparaelcontragolpe Como bien dijo Pellegrino en la rueda de prensa al término del partido en el Santiago Bernabéu, el empate del Valencia ante el Real Madrid no fue una casualidad. Noventa minutos oficiales no es tiempo para dictar sentencia pero se intuye un equipo ché con tintes de Rafa Benítez, Un equipo incisivo, táctico, con toque, oficio y voluntad. Han sido pocas las sesiones de entrenamiento del técnico argentino pero parece que el equipo piensa cuando juega. Se mueve al son del contexto.  Sin balón, repliegan a medio campo, defienden fuerte y concentrados con 8 jugadores detrás del balón. En ataque, siempre hay apoyos cercanos y los extremos se postulan para apoyar, atraer, correr o lanzar.

#ElpasedeDiMaría Del primer Real Madrid de la temporada se pueden extraer pocas conclusiones. Ahí esta Dí María, un jugador que entusiasma pero que no acapara tanto como Cristiano Ronaldo. El "fideo" oposita a estrella del Bernabéu, corre, brega y marca diferencias. En su primer duelo ,en muchas ocasiones, arrancó muy lejos del área, demasiados metros para el "correcaminos" pero Di María es un jugador de tantos recursos como capacidad tiene para mezclar velocidad y visión de juego. Arrancando desde la derecha y con el horizonte a lo lejos, dedujo que no iba a ser contundente en el slalom. Entonces sacó punta al compás de su pierna izquierda y trazó dos pases cuya bisectriz fue la espalda de la defensa rival. Higuaín atacó el destino de tales pases con desmarques de escuadra y cartabón, en el primero hizo gol tres remates después y en el segundo el travesaño evitó un final feliz para los blancos.

Wakaso #Elextremoquejuegauntoque Como contraste a Di Maria, en el Espanyol juega otro zurdo. Un futbolista por consagrarse, en un equipo de mitad de tabla que juega en su lado natural pero atrae al vértigo como el argentino. Son dos extremos elásticos y bulliciosos pero ha diferencia de Dí María, que conjuga visión de juego, toque y gambeteo, el ganhés que esta temporada viste de perico, desborda no por idilio con el balón sino por su obsesión de superar contrarios atacando los espacios. El balón le quema, se ofrece y a un toque lo aleja del rival con un pase. Mientras la pelota rueda, él esprinta para desmarcarse.

#ComoungalgoenelCanódromo El Real Valladolid entrenado por Djukic mantiene su idea de juego en Primera División. Fútbol trepidante, cero especulación. De momento les sirve para obtener su primera victoria en el retorno a la elite. Con el balón como liebre y la portería como línea de metas, los futbolistas actúan como galgos, corriendo veloces sin mirar hacía atrás cuando atacan.